La matriculación de un coche como histórico en España es un proceso que puede aportar múltiples beneficios, tanto fiscales como de conservación del vehículo y no siempre tienen que ser coches baratos.
Un coche histórico no es solo un coche antiguo; es un trozo de historia de la automoción que merece ser preservado y disfrutado con las garantías y privilegios que la legislación española ofrece.
¿Qué es un coche histórico?
Un coche histórico, según la normativa española, es aquel vehículo que tiene más de 30 años desde su fabricación, se encuentra en su estado original o ha sido restaurado adecuadamente, y no está en producción.
Este tipo de vehículos debe tener un interés especial desde el punto de vista histórico o técnico y no se usa de forma asidua, especialmente por limitaciones con los seguros.
Características principales de un coche histórico
Un coche histórico en España debe cumplir con ciertos criterios para ser reconocido oficialmente.
Primero de todo, debe tener al menos 30 años desde su fabricación o ser una edición limitada con cierta antiguedad, garantizando que ha superado el periodo típico de obsolescencia y se considere un vehículo de valor histórico, cultural o técnico. Además, es crucial que el coche mantenga sus características originales, es decir, que conserve los componentes y aspectos tal y como salieron de fábrica, sin modificaciones significativas que alteren su aspecto o funcionamiento original – a no ser que estas fueran típicas en la época en la que se encontraba en venta -.
El vehículo también debe poseer un interés especial desde el punto de vista histórico o técnico. Esto puede derivar de su participación en eventos históricos, su pertenencia a una serie limitada en producción o su papel en el desarrollo tecnológico de la automoción; coches que han tenido relevancia en competiciones, han sido propiedad de personalidades importantes o representan hitos tecnológicos suelen cumplir con este criterio.
Ford T con matrícula histórica
La procedencia del coche y la autenticidad son igualmente importantes por lo que es esencial disponer de una documentación que acredite la historia del vehículo, incluyendo su primer registro, cambios de propietario y cualquier restauración realizada. Esta documentación ayuda a verificar la autenticidad del coche y a confirmar que cumple con los requisitos necesarios para ser clasificado como histórico.
Finalmente, para poder matricular un coche como histórico, este debe pasar por un proceso de certificación y homologación para ser reconocido oficialmente como tal. Este proceso incluye obtener un certificado de vehículo histórico emitido por un club de automóviles históricos reconocido o una entidad competente, y superar una ITV especial que verifique toda la información.
Beneficios de matricular un coche como histórico
Matricular un coche como histórico en España ofrece numerosos beneficios que van desde exenciones fiscales hasta ventajas en seguros y mantenimiento.
Uno de los principales beneficios es la exención del impuesto de circulación en muchos municipios, lo que puede significar un ahorro significativo para los propietarios. Además, los vehículos históricos no tienen que pasar la ITV con tanta frecuencia, generalmente cada cuatro o cinco años, en comparación con la ITV anual o bienal de los coches convencionales.
Los propietarios de coches históricos también pueden acceder a pólizas de seguro específicas que suelen ser más económicas, aunque también con más limitaciones como la cantidad de kilómetros que pueden recorrer al año. Las compañías de seguros ofrecen tarifas reducidas debido a que estos vehículos se usan con menos frecuencia y se mantienen en mejores condiciones.
Además, matricular un coche como histórico contribuye a la protección del patrimonio automovilístico, ayudando a preservar vehículos de valor cultural, histórico o técnico para futuras generaciones en una época con fuertes restricciones a los coches sin etiqueta.
Matricular coche como histórico como el caso de este Citroën Type C
¿Cómo matricular un coche como histórico?
Lo primero que necesitas es asegurarte de que tu coche cumple con los requisitos básicos: más de 30 años de antigüedad, estado original o de la época, y relevancia histórica o técnica.
Debes obtener una certificación del vehículo histórico. Esto se hace a través de un club de vehículos históricos autorizado o una entidad competente, que confirmará que el coche cumple con los requisitos necesarios e incluye una inspección detallada del vehículo.
Con la certificación del club de vehículos históricos, debes acudir a un laboratorio oficial acreditado para obtener un informe de conformidad que verifica que el vehículo cumple con las normativas de seguridad y emisiones correspondientes para su época.
Una vez obtenido el informe de conformidad, deberás pasar la ITV específica para vehículos históricos que es más rigurosa que la ITV estándar y se centra en asegurar que el vehículo está en condiciones adecuadas de conservación y funcionamiento.
Con todos los documentos en mano (certificación del club de vehículos históricos, informe de conformidad y el informe favorable de la ITV), deberás acudir a la Jefatura de Tráfico para solicitar la matriculación del coche como histórico. Aquí deberás presentar:
DNI o documento de identificación del solicitante.
Justificante de pago de tasas correspondientes.
Informe de conformidad.
Certificación del club de vehículos históricos.
Informe favorable de la ITV.
Una vez aprobada la solicitud, recibirás un nuevo número de matrícula específico para vehículos históricos que deberás encargar y que suelen ser de color blanco con los caracteres negros dispuestos de la siguiente manera: H – **** – BBX.
Matricular coche como histórico
Matricular coche como histórico en caso de importación
Si el coche histórico es importado, el proceso incluye algunos pasos adicionales a los anteriormente mencionados:
– Homologación: Debes homologar el vehículo en España, lo cual incluye presentar una serie de documentos, como el certificado de conformidad del país de origen.
– Certificación y conformidad: Al igual que con los vehículos nacionales, deberás obtener la certificación de un club de vehículos históricos y un informe de conformidad.
– Diligencias aduaneras: Deberás gestionar las formalidades aduaneras si el coche viene de fuera de la Unión Europea, incluyendo el pago de aranceles e impuestos de importación.
Este proceso, aunque tedioso, facilita notablemente la matriculación de un coche raro o que nunca se haya vendido en España y que, de otra manera, sería imposible o infinitamente complicado debido a las leyes anticontaminación.
Consideraciones finales
Matricular un coche como histórico en España puede parecer un proceso complejo, pero con la documentación adecuada y siguiendo los pasos correctos, es un trámite accesible.
Los beneficios fiscales y las facilidades en la ITV son ventajas significativas que justifican el esfuerzo y, además, este proceso no solo permite disfrutar del coche en mejores condiciones legales y económicas, sino que también contribuye a la preservación del patrimonio automovilístico.
Para quienes tienen un coche con más de 30 años y desean que sea reconocido oficialmente como histórico, seguir estos pasos permitirá disfrutar de todas las ventajas asociadas a esta categoría.