¿Qué pasa si echas gasolina a un coche diésel?

¿Qué pasa si echas gasolina a un diésel?

Cometer un error al repostar puede parecer un simple despiste, pero si echas gasolina a un coche diésel, las consecuencias pueden ser graves y costosas. En este artículo te explicamos qué ocurre, cómo actuar y qué medidas tomar para evitar daños mayores en tu vehículo.

La importancia de repostar correctamente

Confundir los surtidores y llenar el depósito con el combustible equivocado es más habitual de lo que parece, especialmente si se cambia de coche con frecuencia o se utiliza un vehículo de alquiler. Sin embargo, echar gasolina a un coche diésel puede generar una avería importante, ya que los motores diésel están diseñados para funcionar con propiedades lubricantes específicas que no tiene la gasolina.

Este tipo de error de combustible puede causar desde un mal funcionamiento del motor hasta la necesidad de cambiar componentes clave del sistema de inyección, lo que podría implicar una factura elevada en el taller.

¿Qué pasa si me equivoco de combustible y echo gasolina a un diésel?

La gravedad del daño dependerá de la cantidad de gasolina repostada y si se ha arrancado o no el motor tras el error. Estas son las situaciones más comunes:

Has echado gasolina, pero no has arrancado el coche

Si te das cuenta del error antes de poner el contacto, estás a tiempo de evitar daños. En este caso, lo más recomendable es:

• No arrancar el motor bajo ningún concepto.
• Llamar a una grúa o asistencia para llevar el coche al taller.
• Solicitar el vaciado completo del depósito y limpieza del sistema de alimentación.

Esto suele tener un coste moderado y evita daños mayores.

Has repostado gasolina y has arrancado el motor

Aquí la situación se complica. Cuando se mezcla gasolina con diésel y el motor se pone en marcha:

• La gasolina actúa como disolvente, eliminando la lubricación natural del diésel.
• Los componentes del sistema de inyección (bomba, inyectores, conductos) pueden sufrir un desgaste prematuro o incluso griparse.
• Se generan residuos que afectan a los filtros y al motor.

En este caso, es probable que el vehículo necesite una limpieza completa del circuito, el cambio de filtros e incluso de la bomba de inyección, lo que puede suponer un desembolso de varios cientos o miles de euros.

¿Por qué es más grave echar gasolina en un diésel que al revés?

El principal motivo está en la naturaleza del combustible diésel, que, además de generar energía, lubrica el sistema de alimentación del motor. La gasolina, en cambio, es más volátil y carece de propiedades lubricantes. Por eso:

• Cuando pones gasolina en un diésel, el motor pierde lubricación y puede sufrir daños mecánicos.
• Si pones diésel en un motor de gasolina, el coche probablemente no arranque o lo haga de forma irregular, pero el daño suele ser menor y más fácil de solucionar.

Qué hacer si cometes un error al repostar

Ante una situación de error de combustible al repostar, estos son los pasos clave que debes seguir:

1. No arranques el coche si te das cuenta en la estación de servicio.
2. Informa al personal de la gasolinera y contacta con tu seguro o servicio de asistencia.
3. Traslada el vehículo en grúa a un taller especializado.
4. Solicita el vaciado completo del depósito y limpieza del circuito de alimentación.

¿Se puede evitar este error? Consejos prácticos

Aunque parezca una obviedad, leer bien el etiquetado del surtidor y del tapón del depósito puede ahorrarte un disgusto. Además:

• Si usas coches diferentes con frecuencia, presta especial atención al tipo de combustible.
• Considera usar etiquetas o adhesivos recordatorios cerca del tapón del depósito.

Preguntas frecuentes sobre qué pasa si echas gasolina a un diésel