Los espejos retrovisores del coche

Los espejos retrovisores del coche: ¿son obligatorios?

Los espejos retrovisores son componentes esenciales en cualquier vehículo, ya que permiten al conductor tener una visión clara y amplia de lo que sucede detrás y alrededor del coche, siendo esenciales para la seguridad vial, facilitando maniobras como cambios de carril, giros y estacionamiento, aunque la normativa en el caso de algunos vehículos como algunas furgonetas puede cambiar. 

La importancia de los retrovisores radica en su capacidad para reducir los puntos ciegos, aquellas áreas que no son visibles directamente desde el asiento del conductor y que pueden ser peligrosas si no se controlan adecuadamente.

Qué retrovisores hay en un coche

El espejo retrovisor interior se encuentra en el centro del parabrisas, justo encima del salpicadero y su función principal es ofrecer al conductor una vista directa y sin obstáculos de la carretera y el tráfico que viene de atrás. 

Los espejos retrovisores exteriores, también conocidos como espejos laterales, se ubican en las puertas delanteras, uno a cada lado del vehículo y permiten al conductor observar el tráfico y otros obstáculos que se acercan desde los laterales y la parte trasera del coche. 

Son vitales para realizar maniobras de adelantamiento y cambios de carril con seguridad.

Los retrovisores son ajustables para que el conductor pueda adaptarlo a su altura y posición de conducción.

¿Cuáles son los retrovisores obligatorios en un coche?

La legislación actual para vehículos de hasta 9 plazas determina que cualquier coche debe llevar de forma obligatoria dos espejos retrovisores siendo de obligado cumplimiento los que se sitúan en el lado izquierdo del vehículo, junto al conductor, y en la zona central interior del coche. 

Por tanto, se puede decir que la normativa no establece que el espejo retrovisor derecho sea obligatorio, sin embargo, podrás comprobar que casi la totalidad de los coches lo incorporan. 

De hecho, la propia normativa recomienda su uso general ya que es perfecto para aquellas situaciones en las que el conductor no dispone de la suficiente visibilidad desde el espejo retrovisor interior o este se haya inhabilitado por cualquier motivo. 

Esto quiere decir que si el conductor solo está conduciendo con el retrovisor izquierdo, deberá también incluir el del lado derecho.

Sanciones por no llevar los retrovisores obligatorios

No cumplir con la normativa relativa a los espejos retrovisores puede acarrear sanciones significativas que pueden variar según el país y la gravedad de la infracción, pero generalmente incluyen:

Multas económicas: son la sanción más común por no llevar los retrovisores obligatorios en buen estado y las cuantías de estas multas pueden variar, pero en muchos casos pueden ser bastante elevadas, reflejando la gravedad de la infracción y el riesgo que supone para la seguridad vial.

Puntos en el carnet de conducir: la pérdida de puntos puede acumularse y llevar a la suspensión temporal o incluso definitiva del permiso de conducir si se alcanzan ciertos umbrales.

Retención del vehículo: en casos extremos, la autoridad de tráfico puede decidir retener el vehículo hasta que se subsane la falta de retrovisores, esta medida se toma para garantizar que el vehículo no represente un peligro para el conductor ni para otros usuarios de la vía.

Cómo colocar los retrovisores de forma correcta

Para garantizar la máxima seguridad y visibilidad, es esencial que los retrovisores estén correctamente ajustados. 

Antes de ajustar cualquier retrovisor tienes que tener en cuenta la posición del asiento y asegurarte de que esté en la posición correcta, debes estar cómodo y tener visible el tablero de instrumentos y la carretera.

Para ajustar el retrovisor interior debes tener en cuenta que puedas ver completamente la ventana trasera y que el espejo debe mostrar la mayor parte posible del parabrisas trasero.

Para ajustar el retrovisor exterior izquierdo siéntate en la posición del conductor y ajusta el espejo de manera que apenas puedas ver el borde de tu propio coche para minimizar el área ciega y que te permita ver el tráfico que se aproxima desde la izquierda o los vehículos u objetos de la vía en caso de tener que aparcar..

Por el contrario, para ajustar el retrovisor exterior derecho, toma las mismas referencias desde el lado del conductor para que puedas ver el tráfico que se aproxima desde la derecha.

Después de ajustar los espejos, realiza una comprobación final para asegurarte de que puedes ver claramente en todas las direcciones. Y luego a circular, eso sí, teniendo la famosa regla RSM presente, para tener una conducción eficiente y segura.